Hay películas que traspasan el tiempo; Los que las vivimos como niños en su momento las recordamos con cariño.
La historia Interminable. Esta cinta de 1984, creo que es una de las películas alemanas, mas reconocidas… aunque muchos ahora estaréis descubriendo que es alemana, ¿A que si?… De la homónima novela de Michael Ende (También os recomiendo su lectura), aunque al autor del libro no le gusto nada la adaptación cinematográfica…es mas la aborreció.
Pero, con perdón y respeto, pasando del libro…la película vista por un niño, tiene magia.
En aquellos años fue un bombazo. Ese mundo abierto de la imaginación que mezclaba indios, dragones, duendes, princesas, monstruos… y la imparable nada devorando la tierra de Fantasía.
Un niño, Bastian, se va introduciendo poco a poco en un misterioso libro donde descubrirá que a medida que lee, va formando parte de él.
Atreyu, el héroe con una misión; Fuyur, el dragón blanco de la suerte; El Auryn, el símbolo del infinito, del misterioso libro…¿Pero quién no recuerda esos nombres?…XDD
G´Mork, ese terrible y gigante lobo, siervo de la Nada, que persigue a los protagonistas… la representación del miedo.
Os hablaría horas y horas de ella, pero sé que todos o casi todos, en algún momento de vuestras vidas la habréis visto.
Lo que me gustaría es que, mas allá que volver a verla para recordar cuando eramos pequeños, se la mostréis a vuestros niños y niñas; En estos tiempos poblados de otro tipo de historias, otro tipo de imaginación…es bueno sumergirte en esta película, y volver a emprender la aventura de salvar Fantasía.