Mientras aun se está publicando el manga de Tales of Symphonia, Planeta de Agostini anunció que este próximo septiembre lanzará Tales of Xillia, intercalándose la publicación de ambas, debido a la buena acogida que ha tenido la primera tanda de mangas basados en los juegos de Bandai/Namco.
Esta manga, que acaba de finalizar en Japón este mismo mayo abarcando la cantidad de cinco volúmenes, fue publicado originalmente en la Monthly Comic Gene de Kadokawa y desembarcó hace poco en Europa, ya que está siendo publicada en Francia.
La peculiaridad de Tales of Xillia, es que dentro de este colección, encontramos dos mangas diferentes, dibujados por dos autores diferentes, por una parte tenemos Tales of Xillia Side Jude y Tales of Xillia Side Milla. Donde se narra la historia del videojuego para PS3 desde la perspectiva de cada uno de los protagonistas. En el caso del manga del que hablamos hoy, veremos la historia tal y como la ve y siente Milla.
En esta ocasión Hu-ko seria responsable de plasmar en papel esta historia.
Milla Maxwell una maestra de los espíritus, se ve obligada a abandonar su templo Ni Akeria, por los extraños acontecimientos en los que está sumergido el mundo. Para encontrar esas respuestas deberá adentrarse en Il Fahn “la ciudad de la noche”. Es en el laboratorio militar de la ciudad donde se topará con Jude Mathis un estudiante de medicina que también ha llegado en busca de soluciones ante las inquietantes desapariciones de espíritus que están sufriéndose en los últimos tiempos.
Una vez juntos, los dos deciden unir sus fuerzas en este viaje lleno de misterios que sin duda serán más oscuros y peligrosos de lo que en principio podría vislumbrarse. Durante su periplo, irán añadiendo compañeros de viaje que les ayudarán a vencer a la maquiavélica red que está trabajando desde las sombras en el reino de Rashugal y donde las fuerzas malignas, encabezadas por el rey Natchigal, pueden llevar al caos a Rieze Maxia, el mundo donde humanos y espíritus solían vivir en armonía. Sin saberlo, Milla y Jude pueden tener en sus manos la salvación de la humanidad.